miércoles, 24 de octubre de 2007

Un encuentro enigmático entre dos proceres

Muchas veces se tiende a creer que una obra de teatro que trata un tema histórico puede ser aburrida. Pero Lito Cruz y Rubén Stella demostraron que esta afirmación es totalmente una falacia. Estos actores rompen con la clásica imagen de dos próceres: José de San Martín y Simón Bolívar para apreciarlos desde un punto más humano, más real.
Esta obra de teatro dirigida por Lito Cruz surgió como una propuesta de Pacho O'Donell y esta basada en las cartas que se mandaron los dos personajes históricos que supieron hacer historia.
Bolívar y San Martín son los héroes máximos de la independencia y de la historia de América. Sus luchas se complementan y sus glorias se engrandecen recíprocamente. Sus actuaciones militares se iniciaron en 1812, cuando Bolívar preparó la defensa de Puerto Cabello y San Martín disciplinó a sus granaderos en Buenos Aires. Bolívar avanzo hacia el Sur, ganando la libertad de Venezuela y Colombia en cruentos combates, mientras que San Martín hacia el Norte, liberando a Chile y Perú, en inmortales batallas.
Ambos personajes se admiraron mutuamente y se alegraban uno de los triunfos del otro, tal como se angustiaron con las desgracias de la lucha ajena.
En realidad era la misma lucha porque Bolívar y San Martín siempre pelearon para la liberación de América del mando del poder español. Ya que compartían el objetivo, se debían una entrevista. Así fue, intercambiaron correspondencia y el 26 de julio de 1822 se conocieron. En una de sus cartas San Martín decía:
“Mi alma se llena de gozo cuando contemplo aquel momento: nos veremos y presiento que América no olvidará el día en que nos abracemos..."
Fueron dos encuentros a solas que en total duraron 5 horas, las suficientes para forjar una amistad muy fuerte. Bolívar lo recibió y exclamó: “Al fin se cumplieron mis deseos de conocer y estrechar la mano del renombrado general San Martín".
A medida que el espectador ingresa a la sala del Teatro se pueden ver a los actores en escena ya sumergidos en el personaje. Esto favorece a la contextualizacion de la obra, en esos minutos uno va recreando la época. Es un único acto que transcurre en la casa de Bolívar, un tanto revuelta, con alcohol, mapas, velas, etc.
La obra muestra a San Martín (encarnado por Lito Cruz), debilitado después de treinta años de batallas, muy desesperanzado y dolido porque Buenos Aires no lo perdona por haberse negado a sumarse a la lucha entre unitarios y federales. A pesar de que esta abatido por los dichos que intentaban desestimarlo, sigue defendiendo el sueño de la patria grande.
Bolívar (protagonizado por Rubén Stella), con su encanto y buen humor caribeño intenta animar a su amigo para que se lancen en la conquista juntos. Pero ambos saben que los dos juntos es imposible.
No se sabe de qué se hablo en aquel encuentro en Guayaquil pero fueron 5 horas que bastaron para crear un lazo inseparable. Bastaría un hecho para probarlo: San Martín murió en un cuarto que solo tenia una foto de su amigo Simón Bolívar.
Después de todo, la obra retrata este deseo de hace mas de 100 años de la patria grande, una América unida, el anhelo que aun hoy persiste.

Aca se puede ver un fragmento de la película "El Santo de la Espada" que también retrata el momento en que se conocieron Bolívar y San Martín.





[Micaela Di Fiore]
Ficha:
Sala Carlos Carella - Sindicato de Empleados de Comercio
Bartolomé Mitre 970
Viernes y sábados, 21

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